CRÍTICA A LA CLASE DE FILOSOFÍA
El contenido de mi último blog de este curso será mi opinión personal sobre las clases de filosofía. Debo confesar que al principio creí que lo pasaría mal con esta asignatura. Era la primera vez que la cursaba y me sonaba a que iba a ser bastante difícil. Además, la primera impresión que me llevé del profesor no me ayudó: el profesor infundía un gran respeto con su traje y su corbata, lo que le hacía parecer bastante serio y duro. Sin embargo, cuando empezó a hablar me sorprendí, ya que parecía majo y gracioso, pero esto me inquietó, ya que los profesores no suelen ser así. Además, el profesor se puso bastante duro respecto a algunos temas, lo que me hizo pensar que no debíamos llevarnos mal con él si no lo queríamos pasar mal. También me llevé la impresión de que los exámenes no iban a ser nada fáciles. Creo que me equivoqué en la mayoría de estas cosas.
El transcurso del curso ha ido bastante bien. El profesor se ha tenido que poner duro a veces con algunos compañeros, aunque normalmente, cuando echa la bronca, lo hace de una forma que no se parece a una regañina, ya que sus métodos de echar la bronca son bastante divertidos. Además, el implacable método del cuadrado de la muerte a terminado por surtir efecto, aunque ha costado bastante. En cuanto a la forma de enseñanza, me ha gustado mucho, ya que, en vez de dar la clase de una forma aburrida, en la que, debido a este aburrimiento, no atenderíamos mucho a sus explicaciones, no ha enseñado de una forma más entretenida, haciéndonos reír, y de esta forma ha conseguido atraer nuestra atención y que todos atendamos, hasta la gente que normalmente no lo hace, y, además, no se nos olvidan las cosas que damos en clase y se nos hace mucho más fácil estudiar. Por otra parte, si no entendemos alguna de sus explicaciones, nos vuelve a explicar lo que no entendemos hasta que lo hagamos poniéndonos ejemplos.
Para finalizar, me ha parecido muy bien que el profesor nos de la oportunidad de subir nota con el blog, ya que nos puede ayudar mucho en la nota final, y también me ha parecido justo que el último examen lo pueda hacer con apuntes la gente que ha aprobado y que se haya esforzado todo el curso. Por último, la idea del día de los pastelitos me ha encantado, ya que es una cosa que no habíamos hecho nunca y que nos va a ayudar a despedirnos del curso con un buen sabor de boca, nunca mejor dicho.

¿Se debería prohibir el uso del velo en las aulas?
Últimamente, se ha producido un gran revuelo mediático en cuanto al tema de si se debería usar o no el velo en ciertos lugares, como, por ejemplo, los colegios e institutos. El velo o hiyab está prohibido en el cuarenta por ciento de los centros escolares de Madrid. En estos centros, las razones por lo que está prohibido su uso es porque las normas de estos centros prohíben taparse la cabeza en clase. Otro argumento que se usa es que el uso del velo puede ofender al resto de los alumnos, ya que sus creencias pueden ser distintas. Sin embargo, no es lo mismo cubrirse la cabeza con una gorra, que podría considerarse como una actitud de mala educación, que con un hiyab, que se usa por motivos culturales y religiosos y no pretenden ofender a nadie. En el otro sesenta por ciento de los centros si está permitido el uso del velo. Las razones que se dan a esta decisión son que en ellos se considera a las alumnas libres de expresar su religión y, lo más importante, en estos centros se pone por encima la educación de los alumnos a cualquier norma. Mucha gente puede creer que es bueno prohibir el uso del hiyab porque creen que las niñas son obligadas a usarlo. Sin embargo, las chicas que llevan velo aseguran que nadie las obliga hacerlo, sino que lo hacen porque quieren, porque creen que deben hacerlo, porque es su religión o porque son sus costumbres.
Por lo tanto, ¿es justa esta prohibición?
En mi opinión, las chicas musulmanas son totalmente libres de usar el pañuelo, ya que si se prohibiera el uso del pañuelo se estaría produciendo con ellas un acto de racismo, al vetarlas por su religión, a la vez que se estaría produciendo una gran injusticia con ellas, ya que se las estaría negando su derecho de expresión (el de su pertenencia a otra religión, en este caso). Además, esto sería como atentar contra las creencias de la gente que lo lleve. Todo el mundo es libre de hacer lo que quiera, ya que estamos en un país democrático y, por lo tanto, libre, mientras esto no se haga con la intención de molestar a nadie, y la gente que usa el hiyab no lo hace para provocar ni para molestar a la gente, simplemente lo hacen por motivos culturales o religiosos.

Desgraciadamente, tenemos noticia de actos de violencia casi a diario. Encendemos la televisión y llegamos a ver normal este tipo de noticias, apenas nos sorprendemos, ni siquiera cuando los protagonistas son jóvenes, niños incluso. A raíz de estos actos de violencia entre jóvenes nos preguntamos muchas veces si los adolescentes eran así de violentos en generaciones anteriores a la nuestra. Como en todos los debates, hay opiniones confrontadas a esta pregunta. Algunas personas dicen que ahora hay más violencia que antes por la razón de que se han perdido los buenos modales que se les inculcaban antes a los jóvenes, porque los videojuegos que salen a la venta son cada vez más violentos o por causa de las drogas. Sin embargo, también podemos decir que en la actualidad existe más educación contra la violencia que antes, y, además, al estar esto tan mal visto, surgen asociaciones contra este tipo de actos que pueden llegar a resultar bastante efectivos. Pero también tenemos que fijarnos en que en la violencia, tanto de los jóvenes como de los adultos, influyen muchos factores, como el ambiente personal o social del que estén rodeados: por ejemplo, si los padres de un niño se pegan, el niño lo verá como algo normal y lo más probable es que él también realice este tipo de actos violentos en algún momento de su vida. Puede darse también el caso de que los jóvenes sean violentos sin que estén rodeados de un ambiente de este mismo tipo, sino que estos actos violentos sean una especie de explosión de la rabia y frustración que han acumulado a lo largo de su vida. También existe el factor de las enfermedades mentales, que pueden desarrollar esta violencia, sobre todo si los enfermos no reciben medicación, o bien porque sus tutores no la puedan pagar o bien porque no quieran medicar a los niños por parecerles demasiado jóvenes. Como en todas las cosas, siempre hay casos distintos y excepciones.
Puede que nos parezca que ahora hay más violencia que antes, pero esto es porque ahora las agresiones son denunciadas por la o las personas agredidas y muchos de estos casos salen en los medios de comunicación, cosa que antes no pasaba. Igualmente, aunque veamos casos de violencia entre chicos y chicas jóvenes como algo inusual y raro, como el caso de la chica asesinada en Seseña, la realidad es que estos casos no son nada aislados, siempre han existido, lo que pasa es que normalmente no salen en los medios.
Mi opinión es que los jóvenes son más o menos igual de violentos que antes, ya que siempre han existido factores condicionantes de la violencia y, por desgracia, siempre existirán.
Lo que está claro es que todos tenemos que luchar contra la violencia, y la mejor manera de hacerlo es concienciar a los niños contra la violencia desde el principio de sus vidas, tanto a nivel familiar, como en los colegios y a través de los medios de comunicación.

¿Cómo dar clase a primero de bachillerato?
Dar clase no es nada fácil, pues muchas veces hay que lidiar con alumnos que no se saben comportar, ni siquiera en primero de bachillerato, donde se supone que ya tienes una edad considerable para comportarte como una persona más o menos adulta. Se puede dar clase de muchas formas, pero hay una serie de cosas que hay que tener presentes.
Lo primero que tienes que haber hecho es haber aprendido la asignatura que quieras impartir. Tienes que haber aprendido todo acerca de esa asignatura mediante el aprendizaje constructivo, para poder transmitir esos conocimientos a tus alumnos. Claro que para ello es necesario tener memoria. Necesitas acordarte de esos conocimientos que has aprendido para poder enseñárselos a tus alumnos. Además, si no te acuerdas de quiénes son tus alumnos, de sus nombres y de cómo van en el curso, las cosas resultarán un poco difíciles. También necesitas la memoria para acordarte de los exámenes, de las evaluaciones... Muy importante es que te guste lo que estás haciendo, que te guste tu asignatura, ya que si no tienes esa motivación no harás tu trabajo a gusto ni darás clase tan bien como lo harías si te gustara. Lo que no puede existir de ninguna manera es la frustración. Esta frustración puede aparecer cuando tus alumnos no te hacen caso y no paran de hablar. Si se diera esta situación, tus ganas de dar clase desaparecerían y te podrías llegar a sentir bastante mal, aunque esto último depende de la persona. Así mismo, la inteligencia es clave para dar clase, ya que puede haber alumnos muy mal intencionados a los que debes saber manejar, por ejemplo, si te vacilan, si no te hacen caso... Debes saber lo que tienes que hacer en cada momento, como controlarles y como imponerte, porque en una clase el que manda es el profesor. Tu personalidad tiene que estar bien definida, así tus alumnos sabrán cómo eres, lo que puedes hacer y a qué atenerse contigo. En tu personalidad debe predominar tu yo. Muchas veces puede que quieras matar a un alumno impertinente, pero ese deseo hay que sublimarlo, pues te puede acarrear muy malas consecuencias.
En definitiva, pienso que dar clase, ser profesor, no debe de ser fácil, por eso hay que estar seguro antes de tomar la decisión de serlo.

¿HA MEJORADO EL MUNDO LA CIENCIA?
La ciencia ha ido entrando en nuestras vidas de forma progresiva, pero en los últimos años lo ha hecho de una forma mas acelerada, sin apenas darnos cuenta. La ciencia, para bien o para mal, ha cambiado nuestras vidas de una forma increíble e inevitable. Nos permite hacer cosas que hace unas décadas eran impensables de hacer. Ahora, ¿ha mejorado el mundo la ciencia?
La ciencia nos es muy útil en nuestra vida cotidiana, en ocasiones, imprescindible. Gracias a ella puedo escribir esta artículo en este ordenador, podemos ver la tele, transportarnos en coche... Sin embargo, la ciencia también tiene una parte mala, perjudicial para nosotros, ya que este artículo puede salirme mal y el profesor de filosofía puede ponerme mala nota, la tele me puede dar una mala noticia o un coche puede atropellarme. Como podemos ver, la ciencia tiene su parte buena y su parte mala, ya que nos puede, como en todas las cosas, beneficiar o perjudicar.
Mi opinión personal es que la ciencia se ha hecho, en muchos aspectos, imprescindible para nosotros, ya que nos facilita las cosas. Yo puedo irme a una biblioteca a buscar información sobre algo, pero es mas fácil meterme en Internet en mi casa y buscarlo allí. Pero no solo nos facilita las cosas: nos permite comprender por qué algo es como es. Por ejemplo, el médico italiano Francesco Redi, a partir de un experimento científico (ciencia) nos ha permitido comprender la teoría que el sugirió sobre la generación espontánea.
Resumiendo, la ciencia es muy importante en nuestras vidas y, en mi opinión, ha mejorado el mundo, ya que creo que los beneficios que produce son mayores que los perjuicios.